¡Delicias sin remordimientos ni horno!
Nos encanta el cheesecake, y sabemos que a ti también, así que quisimos embarcarnos en una opción más saludable (“casi vegana”) para que puedas disfrutar de este postre sin remordimientos todo este verano, suena bien ¿verdad?
La idea surgió, debido a una propuesta en Instagram. @ nos comentó que iban a hacer recetas con toque a SUMMER en junio, y nos propuso hacer nuestra receta para luego compartirlas todas juntas en Isntagram, y nos pareció una idea de lo más refrescante y divertida.
Y hemos de decir, que hemos sufrido con esta receta… un poco, no por la preparación en sí (porque es realmente fácil), pero si a la hora de desmoldar… aunque te daremos todos los consejos para que que a ti no te pase 😉
Aún y así el resultado ha sido…
¡¡DELICIOSO!! Muy muy ricos! queda una mezcla cremosa, y aunque obviamente no tenemos “queso”, el sabor que deja el anarcado es dulce y suave…. Buenísimos!!
Sin duda… ya tenemos pensada nuestra versión en… chocolate ¿qué te parece la idea?
¿Los hacemos?
¿Te apuntas a hacer uno de estos cheesecake SALUDABLES y deliciosos?
RECETA
Mini cheesecakes SALUDABLES “Sin Horno” (receta adaptada “Postres Saludables“)
Ingredientes para 5 cheesecakes (tamaño molde para cupcakes)
BASE:
– 60 gr de copos de avena
– 1 cucharadita de canela
– 3 cucharadas de miel
– 3 nueces troceadas
CREMA:
– 125 gr de anacardos
– 130 ml leche sin lactosa
– 1 cucharadita (tamaño café con leche) de panela
– 1 cucharadita (tamaño café con leche) de gelatina en polvo o 2 hojas de gelatina
– 5 frambuesas y aroma de frambuesa
ELABORACIÓN:
Primero ponemos los anacardos a remojar, en un cuenco con agua, durante mínimo 30 minutos o unas horas.
Utilices el tipo de gelatina que utilices, ponla en un cuenco con agua mientras elaboramos la primera capa 😉
Vamos a hacer la capa crujiente de nuestro cheesecake. Pasamos los copos de avena un poquito por la sartén, para que estén algo tostaditos y su sabor sea distinto. Después los añadimos en un bol junto con la canela, la nueces troceadas y una cucharada de miel. Batimos todo, añadimos la otra cucharada de miel y batimos un poco más. *Tiene que quedar una masa compacta pero sea manejable*. Ponemos en la base de tus moldes, te paso te aconsejamos que utilices un molde o moldes individuales de silicona, te resultará más fácil después sacarlos. Déjalos en la nevera mientras hacemos la crema.
Tanto si usas gelatina en polvo como si usas hojas de gelatina, puedes usar el mismo proceso de hidratación
En un cazo, ponemos a fuego medio la leche junto con la gelatina. Cuando empiece a hervir, retiramos del fuego y dejamos templar unos pocos minutos. A continuación, escurrimos el agua de los anacardos y los ponemos en un bol, y añadimos la panela junto con la mezcla de la leche y la gelatina (ya enfriadas). Batimos todo bien hasta que nos quede una masa cremosa.
Sacamos de la nevera nuestro molde y rellenamos con algo más de la mitad de la mezcla los mini cheesecakes. Los llevamos al congelador mientras acabamos la otra capa.
El resto de la mezcla la utilizaremos para la capa final. Añadiremos unas cuantas frambuesas y si tenemos aroma o esencia de frambuesa también, y batiremos otro poquito más. Sacaremos del congelador nuestro molde y rellenamos hasta arriba, y pondremos la decoración a nuestro gusto.
Dejaremos unas 2 horas en el congelador. Pasado este tiempo, los sacaremos y desmoldaremos.
Un exquisito postre, saludable al que no le vas a poder decir que no este verano 😉
Si lo haces nos encantaría que nos etiquetases 😉 #elsecretoendulzadoreceta
Gemma&Tamara
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